Hoy vamos a hablar de una grabadora de vuelo, pero no de una normal, sino de una grabadora conocida como de despliegue.
Cuando hay un accidente aéreo, ¿qué elemento es uno de los más difíciles de encontrar? Efectivamente, hablamos de la grabadora de vuelo.
Pues la principal novedad que presentan estas grabadoras de despliegue es que, en caso de un accidente se expulsará automáticamente del avión, siendo así más fácil de encontrar posteriormente. Esto es muy útil en el caso de accidente de un avión en el mar, ya que la grabadora está realizada de un material flotante que hace que no se hunda.
Su uso comúnmente está enfocado a aviones militares, ya que debido a su alto coste no todos los aviones civiles pueden acceder a dicho gasto, ya que además hay que hacer modificaciones en el aparato para que su expulsión pueda ser efectiva.
Estas grabadoras cada vez están siendo más recomendadas para su uso civil, el por qué recae en los últimos accidentes acontecidos, como por ejemplo el del Malaysia Airlines Vuelo 370 e Indonesia AirAsia Vuelo 8501, accidentes en lo que costó mucho tiempo dar con la grabadora de vuelo.
Frente a este problema, existe otra solución y es la de transmitir los datos del avión de manera inmediata gracias a la conectividad inalámbrica.
Como véis, un futuro de tecnología aún por aplicar, y en el cual está trabajando la empresa Curtiss-Wright.